9 de marzo de 2006

espero de ti que seas tú

espero de ti, que seas tú,
que no te parezcas a mi
o a los humanos;
espero de ti amor,
como espero la quincena,
como espero no mojarme,
como espero a que aparezcas cada noche
en este monitor de reflejos verde-azules.

a veces, no siempre, pero a veces,
veo ojos en pantalla.
yo imagino vida detrás de esos ojos
igual que imagino al duende en la montaña.
¿serás duende o serás montaña?
¿seremos parte de la misma palabra?

y he aquí que se vuelve necesario,
y hasta imprescindible,
no temerle a los eclipses.

yo no le temo a la luz,
ni a la sombra,
le temo al vacío
que sin ti siento ahora.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gusta tu punto de vista....muy lindo